CUERPO DANONE EN LA SOCIEDAD ACTUAL.

El culto al cuerpose a convertido en nuestros días en un fenómeno social bastante señalado. El yo físico obtiene una gran relevancia en los nuevos estilos de vida. A lo largo  de estos ultimos años  se a ido planteando la cuestión de conocer cómo las diferentes biologias entre los diferentes individuos transformandose  en factores de discriminación social. De esta manera, diferentes biologias entre los diferentes individuos transformandose en factores de discriminación social.  De esta manera, diferentes problemas de salud actuales chocan con el ideal del CUERPO DANONE. Convirtiendo la obesidad en una exclusión social, siendo uno de los ejemplos más claros.  Es necesario comprender como se han ido impuesto criterios sociales para estigmatizar a ersonas que en su vida cotidiana realmente no les supone un obstaculo al realizar vida social. Hasta las primeras décadas de nuestro siglo, ser corpulentos era símbolo de bienestar, lo que suscitaba una sensación de buen aspecto físico en contraste con la apariencia pobre de obreros y desempleados, que padecían hambre y no tenían ningún “peso” en la sociedad. Experimentar un ostentoso placer por la buena y la rica cocina, expresión de lo superfluo y del lujo de la clase poderosa de aquella época, se convertía de esta forma en un elemento determinante para el juicio estético sobre la persona.
Particularmente en tiempos y en países azotados por la miseria y el hambre, la persona bien nutrida ha
representado, y en parte todavía hoy lo representa, un ideal digno de envidia. En la India, un país que ha
sufrido la desnutrición, Buda no ha sido representado con una ascética delgadez, sino con el rostro lleno
y bien nutrido.

En esta unión de belleza y represión en el culto de la línea vemos una de las paradojas de nuestra civilización.
El cuerpo en su materialidad y sexualidad, ya sólo tiene una función de soporte de dos leyes totalmente
distintas a las de la satisfacción: el imperativo de la moda y el imperativo de la muerte. La mística de
la línea, el atractivo de la esbeltez, ser han enraizado profundamente en nuestra cultura precisamente como
forma de violencia.Vivimos esclavos del cuerpo y de la moda con la repercusión social que está generando la modificación corporal mediante la cirugía plástica como mecanismo de actuación inmediato y remedio para la no aceptación de la corporalidad originaria con estos argumentos se me origina una pregunta : ¿ llegaremos a querernos tal y como somos?